NO SIN MI HIJA
El
título de este magnífico relato de Betty Mahmoody me viene a
colación para adentrarnos en el movimiento materno que últimamente
envuelve a nuestros políticos y famosos. Yo también estoy pensando,
que el día que mi nieta no pueda ir a la guardería llevarla a mis
clases de la Universidad de Mayores. Que Fran Rivera ha metido la
pata no hay quien lo dude, ese alarde de machismo le traerá algún
que otro dolor de cabeza que, naturalmente, a estos personajes de
visible súper ego poco les importa. Todo lo contrario, en época de
vacas flacas, tampoco viene mal un extra de portada en revistas del
corazón. Pero no hemos de preocuparnos de las consecuencias que
puedan traer en el mundo taurino, aparte de una bonita foto y la
recopilación de otras con famosos que enseñan sus hijos en otras
tantas actitudes más o menos peligrosas, servirá para
sensibilizarnos de las muchas barbaridades que por imprudencia vemos
a diario y que las autoridades parecen ignorar. A menudo circulan
vehículos con niños sin el mínimo sistema de seguridad en los
asientos, en vehículo que no han visto la ITV ni por el forro y por
consecuencia, poniendo en peligro la numerosa familia que
transportan, sería difícil se libraran del alcance los que
tuvieran la mala suerte de encontrarse en su camino. En algo ha
puesto el torero la mano en la llaga: "Que el Defensor del Menor se
preocupe de los problemas serios de verdad". Sobre menores son muchos
y están a la vista de todos. Echen un vistazo a las redes sociales y
hallarán cuantos se exhiben sin ningún pudor, a veces con el
benemérito de sus progenitores o por ellos mismos y su ignorancia.
Siéntense delante de sus televisores, mírenlo con ojos de niño,
verán qué cantidad de escenas hay con lenguaje, obscenidades,
violencia y sexo tan poco apropiado para ellos. No vean el trabajo
que se les acumularía señores letrados.
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