EL GATO DE ANTONIA
Poema cedido por mi amigo
José Luis Reinoso y
que ha dedicado a mi gato
Antonia
Marcelo tiene un gato muy singular,
Duerme
con ojos abiertos, está a los pies de la cama
Y
no escapa del lugar;
No
se sube a los tejados por las noches a ligar,
Y
no encandila a las gatas porque no le oyen maullar.
Ante
tamaña rareza, surgen preguntas por dudas:
¿Será
el gatito invertido
Y,
como tampoco busca compañía de los mininos,
Del
armario aún no salido?
¿Acaso
es introvertido
Y
no le gusta jugar?
¿No
será que el pobre gato, a más a más de lo dicho,
Padece
de algún trastorno que le impida copular?.
Yo
digo –alude
alguien- que es un felino
De
muy extraña manera.
Y
yo aclaro que se trata de un gatito de madera.
José
Luis García Reinoso / 2014
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